Quilmes perdió 2 a 1 frente a San Martín de Tucumán, en el Estadio Centenario, por la fecha 16 de la Primera Nacional y ya suma 6 partidos sin conocer la victoria. Jano Coronel convirtió el gol del Cervecero, mientras que Juan Cuevas y Jesús Soraire hicieron lo propio para el Santo.
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| Foto: Prensa San Martín de Tucumán |
Aunque los hinchas llegaron al Centenario impacientes y descontentos por la actualidad del equipo, el conjunto de Sergio Rondina salió enfocado y con una presión alta, tanto que antes de llegar al minuto de juego, Emanuel Herrera remató y exigió a Dario Sand. La intensidad del Cervecero era agobiante, los tucumanos no podían salir de abajo y el Decano tuvo varias situaciones de gol. Una de las más claras fue protagonizada por Herrera, el cual intentó eludir al arquero en un mano a mano pero desaprovechó una chance inigualable.
A los 46 minutos, luego de un centro de Camilo Machado y un cabezazo de Aranda, Coronel, con un hambre característico de Alsina y Lora, quedó frente al arco y convirtió el único tanto de Quilmes en el partido.
Desde el arranque del segundo tiempo, el local salió muy dormido, le dió espacio al rival y a los 5 minutos, Cuevas convirtió un gran gol desde afuera del área. Parecía que Quilmes era un equipo distinto en la otra mitad, volvió a ser el mismo plantel que no ganaba hace 5 partidos. La desesperación era evidente, la gente le reprochaba a los jugadores la poca actitud y estos no encontraban la pelota. En un ataque Cervecero, los defensores quedaron mal parados y Esquivel, de gran partido, gambeteó a dos jugadores e impactó la pelota en el travesaño del arco de Esteban Glellel.
Todo el estadio estaba impactado, era inaceptable lo mal que estaba jugando Quilmes a tan solo 15 minutos del arranque del segundo tiempo. Rondina intentó meter mano en el equipo, pero no fue de la mejor manera: Salió Coronel (autor del gol) por Capano, cuando el cambio tendría que haber sido por Marcos Roseti.
Para finalizar una segunda mitad desastrosa, sin jugadas claras por parte del Decano, a los 37 minutos de la segunda mitad, luego de otra pelota que impactó en el travesaño, Soraire controló y definió bien pegado al poste, por lo que nada tenía para hacer Glellel.
La hinchada explotó, Quilmes volvió a perder en el Centenario y quedó décimo en la tabla, fuera de los puestos de reducido. Los jugadores y el cuerpo técnico decidieron no dar declaraciones a la prensa.
Por: Facundo Inda