Quilmes empató por 0 frente a Tristán Suárez, en el Estadio 20 de Octubre, por la fecha 17 de la Primera Nacional y suma 7 partidos sin conocer la victoria. Aunque el Cervecero dominó todo el encuentro y tuvo las más claras, los delanteros no pudieron batir la portería del Lechero y se traen un amargo punto desde Ezeiza.
Tras dejar una pálida imágen frente a San Martín de Tucumán, el equipo de Rondina buscaba cambiar la cara y llevarse 3 puntos en la última jornada antes del receso. En las primeras jugadas Tristán Suárez parecía mejor, pero a partir del minuto 10 el Cervecero empezó a animarse y a salir del fondo.
Aunque en el primer tiempo El Lechero tuvo algunas claras, como la salvada en la línea de Pérez (que finalmente iba a ser offside) o algunas atajadas de Esteban Glellel, el Cervecero jugaba de igual a igual, con una gran actuación de Marcos Roseti, el mejor jugador del partido. Los laterales desbordaban para tirar centros, pero ninguno fue bien aprovechado por el doble nueve. La más clara del partido llegó a los 32 minutos, cuando luego de una gran jugada de Roseti, el 10 lo deja enfrente del arco a Oscar Belinetz, el cual desaprovechó un mano a mano inmejorable.
Ya en el segundo tiempo, Quilmes fue el dominante completo del juego. El local estaba muy tirado atrás y, gracias a Roseti, el Cervecero no paraba de provocar situaciones de gol, por lo que tuvo que aparecer en varias ocasiones el arquero de Tristán Suárez, Joaquín Mendive. El equipo de José María “Pancho” Martínez tenía una clara falencia en la defensa de sus laterales, por culpa de las buenas actuaciones de Federico Pérez, hasta que Rondina decidió sacarlo por Mariano Miño, lo cual fue un cambio desacertado y le quitó profundidad al Decano.
Roseti siguió generando buenas jugadas y habilitó a los delanteros varias veces, pero estos nunca pudieron concretar el gol de la victoria. Tanto Belinetz como Emanuel Herrera tuvieron una pésima actuación y agiganta su carencia de gol, por lo que es un claro condicionante a la hora de decidir los nuevos refuerzos en el mercado de pases. Además, para profundizar la mala actuación la delantera, a los 35 minutos de la segunda mitad (luego de otra gran jugada de Roseti), Herrera se manejó displicente y desperdició una clarísima chance de gol.
Así lo vive el entrenador, Sergio Rondina: “Sacando el contexto, fue un gran partido. Salvo los primeros minutos, el equipo se acomodó y tuvo chances de gol. Nos faltó convertir. Por el contexto en el que venimos, nos vamos con sabor a poco”.
Con este partido, el Cervecero quedó afuera de la zona de reducido y deja un primer semestre nefasto, muy lejos de lo que se esperaba.
Por: Facundo Inda.